martes, 4 de marzo de 2014

Acróstico y Epitafio al Calígrafo Víctor Manuel Cardona Sigüenza

Viviste para dejarnos tu grafía,
Inmortalizando así, tu hombría;
Como no tenerla como ejemplo
Tomando en cuenta tus facetas especiales.
Oh, excelso de la amistad sincera
Recibe el holocausto que te brindo.

Mañana cuando resucite tu hidalguía
Anidarás de nuevo en mi poesía,
No habrá ocaso para huir de tu familia;
Un amigo más, te lo jura en tu partida.
Es por ello que de ti guardamos
La estela de amistad y cariño que nos diste.

Correos enmarcó tu esencia,
Así como tus amigos, tu elocuencia,
Reciprocidad te da tu Xelajú querido
Donde esculpiste tu imagen bien amada.
Oh excelso de la amistad sincera
No olvides el holocausto que te brindo
Aunque mi alma sea impura todavía.

Satúrala desde donde estés amigo mío,
Invítala a dejar el lastimero estío,
Guárdala de la melancolía o tristeza,
Unifica la oración en sus entrañas,
En esa forma descansarás tranquilo,
No dudarás del amor que te ofrendamos;
Zumo divino será para tu alma santa
Aunque a veces la misma tristeza nos traicione.


Respetuosamente:  Rodimiro Gramajo Rodríguez.
Asociación de las Artes y la Cultura de Quetgo.
y Grupo Literario Vértice.


jueves, 27 de febrero de 2014

En el Video de Ana María González López.

Este paso que has dado
es un presagio bello para Quetzaltenango
porque hace volar la poesía
y cautivar en otra forma cada alma.

Por eso hay tantas flores en el campo
que tratan de atraernos tanto
hasta comprender la magnánima belleza
y no solo ver la primera a nuestros ojos.

Por eso el poeta la hechiza,
no digamos tú, mi preclara poetisa;
hay tantas estrellas diferentes en el cielo
para conocer la creación que mucho te ama.

Se que tus esfuerzos forman otra gloria,
que la Literatura formará tu historia,
para incentivar a cada generación sensible
que traiga en su sangre rima y verso.

A veces quiere fenecer mi inspiración,
marchitarse mi endeble corazón,
pero este video me reanima a vivir
y seguir tu ejemplo tan sincero.

Esto ratifica mi prédica lejana
donde digo que Quetzaltenango es hermano
de la cultura que perfuma y embalsama
al otro hermano que está allá de sus fronteras.

El que está en vigilia por su nombre
y ora porque la ideología quetzalteca asombre
y a la vez sea humilde como siempre
para llegar más allá de sus estrellas.

Te agradecemos oh, Ana María
este ramillete de versos en poesía,
esperando que sea constelación eterna
en el numen de tu Grupo Literario Los Quijotes.

Y, cuando florezca el venidero,
anhelo traiga "aromas del sendero"
para que Quetzaltenango siga inmaculado
tanto, tanto, hasta hacerlo tantas veces inmortal.

Autor:  Rodimiro Gramajo Rodríguez.



sábado, 15 de febrero de 2014

Acróstico al programa de TV "Entre Nosotras"

Proyecto mi oración hacia el Creador
Rogándole encuentres tu objetivo
O tu eco hacia hacia la mujer divina;
Gracias a ella estamos en la tierra.
Recuerdo a mi madre en cada una
A pesar que he pecado sin medida;
Me conformo con elogiarte ahora
Agradeciéndote el mensaje que conllevas.

Entrelazar a la mujer hacia la gloria
No es difícil cuando tenemos corazón,
Tomando en cuenta esta humanidad
Resentida, pero a la vez arrepentida
En dónde Elsie Sierra es una luz.

No olvido la fémina pura y santa
O la que ha tomado el camino con prejuicios;
Solo sé, que volverá a su redil cuando allá muera
O la perdone Dios igual que a Magdalena.
Tomaré este ejemplo en mi poesía
Rezaré por el mientras yo viva,
Añorando que la mujer y sus valores
Sean por siempre, de mi patria sus honores.

Autor:  Rodimiro Gramajo Rodríguez.


Himno a Nimajuyú I.

Elevamos en alto tu nombre
para que nadie lo pueda manchar;
es la gloria tu tributo divino
y cada familia tu nítido altar.

Eres el aposento del ideal redentor,
no digamos de nosotros también,
eres fecundo en tus cuatro costados
que abrazan el ideal y tu edén.

CORO

Eres fecundo en tus cuatro costados
que abrazan el idel y tu edén
educando el corazón y el alma 
de generaciones que te aman y ven.

Honrar tu bandera os pide el deber
para ponerla en su bello sitial
como verbo que enseña cuidarte
con honor y amor especial.

Ofrezco mi alma sin alguna medida
para defenderte hasta la eternidad;
si mis fuerzas murieran un día
estarán tus hijos que te darán potestad.

CORO

Si mis fuerzas murieran un día
están tus hijos que te darán potestad
para honrar tus valores enhiestos
que buscan tu tranquilidad.

Por ello levanto mi numen
para que veas mi fe y oración
por verte lumínico y grato
y siempre erguido cual valioso pendón.

Solo Dios conoce mis ansias
para evocarte siempre con sinceridad,
pregonar tu esencia será mi consigna
en agradecimiento a tu lealtad.

CORO

Pregonar tu esencia será mi consigna
en agradecimiento a tu lealtad,
no solo por ser mi estrado especial
y el calor de mi hogar y verdad.

Por eso recibe mi himno querido
que nació en tu lúcido altar
que habrá de llevarte a la Historia
por dejarme en ti, pernoctar.


Autor: Rodimiro Gramajo Rodríguez.
miembro del Comité Unico de Barrio.
2013-2014.



Astrid López.

"Poesía es creación de la belleza",
por ello anida en ti;
no puedo inadvertirla te lo juro,
sería perder otro talento ante mi Dios.

En cambio al plasmarla aquí
cumplo con el don encomendado;
mi vida se hace aceptable
y tú, mi bella inspiración.

La oración cuando es pura y santa
sale del fondo del corazón,
cuando la poesía es sincera
se beatifica más la Creación.

Por ello vivo de ti agradecido
por darle aliento a mi poesía,
por evitarle la agonía
que en ella presentí.

Hoy,
renace entre tus ojos,
se perfuma en la quimera;
eso si, con la esperanza:
Que cuando muera, morirá en ti.

domingo, 26 de enero de 2014

Recuerdos de una Madre.

Cada vez cuando llega el mes de mayo
aunque no quiera, te recuerdo con amor
de tristeza, nostalgia, lloro, desmayo
mi triste corazón recuerda el dolor.

Las mañanas cuando el jardín regabas
con tanto cuidado, mesura, trataste,
flores que con tanto cariño tocabas
contemplo que con tu partida marchitaste..

Como tu marchitas el alma mía, madre
y sufro, lloro y lloro tu ausencia
tu presencia dejó iluminada la tarde,
tarde que en mi ser pasa con paciencia.

Tanto me quisiste, con amor sincero
me educaste y me diste orientación
y haré tu voluntad porque te quiero
a Dios pido para ti su bendición


Autor:  Julio Méndez Sim..

Encuentro Fortuito.

Te vi por última vez
una tarde de domingo
al verte sentí respingo
de la cabeza a los pies.

Deseo de estrecharte sentí
saber de tu vida, amor
hubiese sido un favor
escucharme lo que sufrí.

Tantos años sin verte
pensando siempre en ti
en tu perfume de alhelí
ha sido siempre mi suerte.

Por qué el destino inclemente
separarme de tu lado
quiso, hacerme desgraciado
no borrarte de mi mente.

Y si no puedo tenerte
en mis brazos nunca más
por qué me castiga tenáz
hasta herirme de muerte;

Deseo de volver a verte
desde entonces me quedó
anhelo que fracasó
para mi infausta suerte.

No sé si algún día te veré
ojalá esto suceda
antes que mi vida ceda
así tranquilo moriré.

Autor:  Julio Méndez Sim.

Sensibilidad.

Cómo tarde bella y soleada
parte presurosa al declinar el día
así un día se marchó mi amada
sin importarle lo mucho que sufría.

Mi gran tristeza y desesperación
no lograron a mi lado retenerla
tampoco recurrí a su compasión
porque eso significa poseerla.

La dejé partir con tanta ternura
las lágrimas opacaban mis ojos
gustaba de sus besos la dulzura.

Abismo inmenso a mis pies se abría
sellando sus hermosos labios rojos
inútil fue, confirmar mi hombría.


Autor:  Julio Méndez Sim.

Ojitos Claros.

Como una estrella que brilla en el firmamento
te veo inalcanzable, y en mi pensamiento
el amor no escucha razones, es ciego
la fuerza de mi amor romperá tu ego.

Aunque siento en mi corazón tus vibraciones
de amor, y tus palabras como canciones
bellas, que hace latir al corazón más fuerte,
el mío tan débil sólo le causarás la muerte.

El amor más bello, conmigo lo hallarás,
la dulzura y manjar de abejas encontrarás
mi corazón te pertenece, recuérdalo
sin tu mirada bonita estoy sin halo.

Tus ojitos bellos siempre llevo en mi mente
como chispas divinas, bendicion en torrente,
dame tu amor, tu lo quieres, yo también
en este viaje de amor, los dos y en tren.


Autor: Julio Méndez Sim.

Tu Voz.

Buscaba alivio mi corazón
transido por el dolor de tu ausencia,
había sufrido mucho y con razón
necesitaba de ti, tu presencia.

Deseaba tenerte entre mis brazos
luego, escuchar tu voz llamándome,
sentí abrirse mi pecho en pedazos
y el corazón, a ti empellándome.

Contemplar tu bello rostro enmarcado
por tu sedosa y negra cabellera
fue como ver el cielo azulado
y condenado de alma entera.

En tu ventana te vi preciosa,
jamás olvidaré ese momento,
tu belleza es el de una rosa
en mis oídos tendré tu voz, tu acento.

En mi vida eres la única mujer
que acelera el ritmo de mi corazón,
nunca.. jamás te dejaré de querer
eres de mi vida la impar ilusión.

Autor:  Julio Méndez Sim.

Tortura.

¿Sabes tener el corazón opreso
por un gran amor que nos aprisiona?
cuando se desea con ansias un beso
del ser que su recuerdo nos emociona.

El martirio de sentirla ajena
te destroza el corazón en pedazos
en el amor angustiosa la pena
es cuando te desprecian esos brazos.

Por qué cuando damos el corazón
entero, completo, sin condiciones
el puñal del desdén hiere sin razón.

Y...cuan pesada es la indiferencia
tortura y mata tus ilusiones
recibes el dolor, como sentencia.

Autor:  Julio Méndez Sim.

Legado.

Quizá fue tan efímera la historia
de nuestro amor, como pétalos tersos
fragancia que perdura en tu memoria
hasta el día que estarás en la gloria
y tengan final mis humildes versos.

Tu condena será recordar mi amor,
el amor más grande, sublime y puro
como nadie te amó, eso lo juro
porque, sufrí demasiado, inmenso dolor
me ha causado, en mi vida lo más duro.

Me verás dondequiera, en el incierto
anochecer, en la alborada rubia
buscarás imaginándome despierto,
no me hallarás porque estaré muerto,l
sólo escucharás caer los hilos de la lluvia.

"Y habrás de recordar, esa es la herencia
que te da mi dolor, que nada ensalma
será cumbre de luz en tu existencia
y un reproche inefable en tu conciencia
y una estela inmortal dentro de tu alma."

(Copiado textualmente)


Autor: Julio Méndez Sim. 

Recuérdame.

Cada vez,  recuérdame cariño mío
como yo siempre te recuerdo amor,
tú, recuérdame sin ningún temor
no dejes que tu pecho sienta frío.

Si alguna vez te quise tanto
hasta renunciar de mi propia vida
es justo que recuerdes mi partida
cuando viste por ti soltar mi llanto.

Amor tan grande nunca he sentido
por mujer alguna nunca he llorado,
por ninguna me sentí abandonado
pequeño por vez primera me he sentido.

Autor: Julio Méndez Sim.

Amor Efímero.

Fue un instante fugaz, un meteoro
pero fue tan intenso y tan profundo,
que no lo cambiaría por todo el oro
oculto en las entrañas de este mundo.

Fulguró como un rayo aquel instante
y huyó la oscuridad despavorida,
tuvo esa brevedad de estrella errante,
pero fue para mi toda una vida.

Amor intenso y breve que ha pasado
dejando en mi corazón infiltrado
sentimiento infinito de tristeza.

Amor que solo vive de esperanza,
y en el mundo irreal de la añoranza
evoca el esplendor de tu belleza.

Autor: Julio Méndez Sim.

Evocación.

Una mañana clara y soleada de junio
y contemplando las flores, te recordaba
destrozaba mi corazón el infortunio
de sentirte mía y a la vez alejada.

¿Por qué habrá terminado nuestro amor?
tan puro, sincero, cristalino como mar,
recordarte...es mi hábito aunque cause
dolor
porque sé que nunca a tu lado podré estar.

Si verte nuevamente, fue volver a sentir
volver a vivir aquel inmenso amor
que aun vive y un tiempo me hizo sufrir
sentir quiero, el fuego de tus labios con
ardor.

Empecinado en el recuerdo, mi mente
no te olvida, aunque la razón aconseja
olvidarte, te recordaré tristemente
aunque tú nunca, nunca escuches mi queja.

Autor: Julio Méndez Sim.

La soledad.

Mi compañera fiel o la causante de mis problemas?
La única que está cuando todos se van.
La que me complica la más sencilla situación.
La que me ahoga en un vaso de agua.
La soledad esa ingrata que da tanta compañía.

La soledad, mi paz, mi tranquilidad, la causante de mi ser.
Esa sombra que se ve en la oscuridad.
Ese momento tan cálido y frío a la vez.
Ese rayo de sol en la penumbra de la noche.
Esa gota de agua perdida en el desierto.
La soledad una puta desgraciada que está conmigo, y con todos.

La soledad mi más grande amor.
La que me rompe el corazón, pero no puedo dejar.
La que me seduce desde que nací y no se conforma con ser mi amante.
La soledad la que si no es mi vida, no es nada.

La soledad, la cábala de mi vida.
la que nos recuerda el por qué tenemos que vivir,
La soledad; esa razón que me insita a luchar.
La soledad, la causante de mi odio y el motivo de mi amor.
La soledad, la causante de mis problemas pero, mi compañera fiel
incluso en la muerte...

Autor:  David Ernesto Barrios Pineda.

Te necesito.

Cómo la sutil brisa
que acaricia el amanecer,
¡Tan linda es tu sonrisa!
Que igual no ha de haber.

Apareces como un ladrón
y te apoderas de mi,
tu me robaste el corazón
y yo vivo pensando en ti.

Cómo escuchar un grito
que se pierde en la oscuridad,
tu amor es lo que necesito
para borrar mi soledad.

Si tus ojos son el mar
y tu cabello las olas,
en ti me quiero ahogar
para no morir a solas.

Autor: Mario Rodríguez Palacios.

Divina.

Cuando te veo pasar
yo pierdo la razón,
si el agua va al mar
yo iré a tu corazón.

Infinito es el día
cuando no te puedo ver,
se me acaba la alegría
y sólo tú, la haces volver.

Luces siempre tan divina
como una flor en primavera,
eres agua pura y cristalina
que corre por el río placentera.

Eres un ángel del cielo
con una gran misión,
para el artista eres modelo
para el poeta su inspiración.

Autor:  Mario Rodríguez Palacios.

Amor oculto.

Lo que veo en tus ojos
es una señal de emoción,
lo que dicen tus labios rojos
lo niega tu corazón.

No digas que ha muerto
lo que hay entre los dos;
lo que siento, es cierto
y de testigo está Dios.

Yo se que tratas de ocultar
este cariño en tu mente,
pero nunca debes olvidar
que el verdadero amor se siente.

Tus palabras dirán tal vez
pero no así tu mirada,
que me dice cada vez
de nuestra pasión atrapada

Autor:  Mario Rodríguez Palacios. 

Ella.

Ella llegó de repente
y ahora se va de mi vida
ella está siempre en mi mente
pero no sé, si volverá.

Ella se lleva esa ilusión
que parecía una eternidad;
ella deja a mi corazón
hundido en la soledad.

Ella una rosa sembró
en medio de la gloria,
de ella no me olvido yo
ni borrando mi memoria.

Ella me hizo sonreír
cuando me sentía mal,
ella ahora me hace sufrir
que ha llegado  el final.

Autor:  Mario Rodríguez Palacios.

Por tu amor.

Por un beso haría
a las estrellas bajar,
mi alma te regalaría
para contigo siempre estar.

Por tener esa mirada
me iría al firmamento;
y convertiría a la nada
en un bello pensamiento.

Por probar esa miel
que desprende tu boca,
dulce haría yo la hiel
y tan suave la roca.

Escribiría una canción
con la frescura del rocío,
para sentir a tu corazón
latir junto al mío.


Autor. Mario Rodríguez Palacios. 



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¿Como saber?

¿Cómo saber si ella
quiere estar conmigo?
¿Cómo saber si una estrella
le serviría de abrigo?

¿Cómo saber si el fuego
le da todo su calor?
¿Cómo saber si este ruego
hará que acepte mi amor?

¿Cómo saber si el cielo
es donde ella duerme?
¿Cómo saber si este anhelo
hará que me enferme?

Soy un pájaro herido
que no sabe donde ir,
si me das lo que he perdido
te  amaré hasta morir.

Autor: Mario Rodríguez palacios.

¿ Por qué será?

¿Por qué será que hay injusticia
cuando se habla de verdad ?
¿Por qué será que la avaricia
termina con la sinceridad?

¿por qué será que hay malicia
cuando se debe querer?
¿Por qué será que una caricia
es algo difícil de comprender?

¿Por qué será que hay traición
cuando existe la lealtad?
¿Por qué será que en tu corazón
ya no penetra la amistad?

¿Por qué será que hay amor
y nadie lo quiere dar?
Por qué será que el temor
nadie lo quiere enfrentar?

Autor: Mario Rodríguez  palacios.

Pienso en ti.

Veo la lluvia caer
y me siento abandonado, 
quisiera yo comprender
este amor apasionado.

En ti vivo pensando
y si no te veo un día,
mi vida se va acabando
como un pájaro en agonía.

Veo a los ríos secarse
y a mis ojos llorar,
veo al cielo alejarse
como una ola en el mar.

Un ángel veo venir
para darme su protección,
sí el amor es compartir
te regalaré mi corazón.

Autor:  Mario Rodríguez palacios.

Debes creer.

Debes creer en ganar
y nunca en perder,
si en algo has de fallar
también vas a aprender.

Debes creer en Dios
y no en falsedad,
porque juntos los dos
son señal de verdad.

debes creer en la vida
y nunca en morir;
lo bueno nunca se olvida
y contigo se ha de ir.

debes creer en el amor
y no en la traición,
olvida todo el rencor
y ama con el corazón.

Autor: Mario Rodríguez Palacios

IFEBO

Tanto he esperado el encanto de esta fecha
para elogiarte desde los umbrales de la historia,
la que has bordado en Quetzaltenango
para inmortalizar a Guatemala allá en la gloria.

No hay más testigos que afloren en mis versos,
como lo es Dios y tú, que todo ensalma;
es que no te han importado los abrojos
para llegar a tu sitial en bella calma.

Has polinizado la educación en esta patria
hasta formar constelaciones en la gran sabiduría,
no hay nadie que se oponga a tus preceptos
o mancille tu propio olimpo que formaste un día.

Has formado corolarios de féminas benditas,
has dejado en ellas tu inmensa educación de amor;
quienes han formado constelaciones en el cielo
y ejemplos terrenales de cultura y esplendor.

Tu caminar nunca ha sido incierto
porque llevas el ánfora de luz para educar;
tu lámpara tiene el aceite de néctar tan divino
el que nadie ha podido en otros lares encontrar.

Es que tienes desde el día en que naciste
la magia positiva que honra y ennoblece,
la que multiplica tus talentos
junto al pan del saber sacrosanto que bendice.

Ello engrandece mi poesía
y mi espíritu se purifica con más razón;
tan solo, por estar aquí en tu estrado
ya me imagino en tu noble corazón.

Por ello soy tu heredero más humilde
para darte los versos que Dios me regaló
para escribirlos en el prisma de tu cielo
y en los laureles que también te develó.

Así retribuimos algo a tus inéditos esfuerzos
que han sido invalorables a la juventud
que conforma tus vergeles tan eternos
donde estoy seguro no hay otro como tú.

Bendito seas en tus nítidos costados
y en tu consigna educativa de bondades;
anhelo que tu barca bien calafateada
nunca decline en oscurantismo y tempestades.

Es así como templas tu armadura
y le pones iridiscencia a tu sendero
para apartar las tinieblas de tu paso
y alcanzar el objetivo verdadero.

Porque no hay más lúcido ahínco
que llevar a tus niñas a la verdad y a la razón:
En que la mujer es el origen de la vida
y el perfume y hálito de esta bella creación.

¡Bendito seas oh, IFEBO sacrosanto;
columna vertical de mi bella Xelajú..!