viernes, 9 de agosto de 2013

Niño hermoso.

(Dedicado a mi hijo Estuardo García Barahona)

Tus grandes ojos almendrados
radiantes y expresivos,
cautivan el corazón
de toda doncella.

Eres la creación perfecta de Dios,
pues él en su infinito amor
te hizo a su semejanza.

Te veo con ojos de ternura,
te llené de cuidados,
te amé, te amo y te amaré
porque eres mi hijo amado.

Ya no puedo cargarte en mi regazo
pues has crecido demasiado
ahora a tu pecho yo me poso
para que tu me abraces en el tuyo.

Estás tomando la fuerza de un roble
porque ya no eres un niño
te has convertido en un hombre.

Cargado sobre mi pecho
tu sueño yo velaba,
ahora que has crecido
te quedas solo en tu almohada

Eres mi príncipe hermoso,
el niño que yo deseaba
y aunque me duela verte crecer
he de hacerme a la idea
que algún día te he de perder.

He de soltarte mi niño,
para que seas un hombre de bien,
que tome sus propias decisiones
sin depender de esta mujer.

Autora: Amarilis Barahona vargas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario